Una maternidad real, empática y acompañada

Cada primer miércoles de mayo se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental Materna, una fecha que busca visibilizar la importancia de cuidar el bienestar emocional de las madres durante el embarazo y el primer año tras el parto. Este día nos invita a romper silencios, desmitificar la maternidad idealizada y construir redes de apoyo para quienes transitan esta etapa vital.

Salud mental perinatal: una prioridad

Los trastornos del estado de ánimo y la ansiedad perinatal (PMAD, por sus siglas en inglés) afectan a aproximadamente 1 de cada 5 mujeres en el mundo durante el embarazo o el posparto. Estas condiciones, que incluyen depresión, ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo, trastorno bipolar y psicosis posparto, a menudo pasan desapercibidas y no reciben tratamiento oportuno, lo que puede tener consecuencias duraderas para la madre y el bebé.

¿Qué síntomas tener en cuenta?

Los síntomas pueden manifestarse en cualquier momento del embarazo y hasta 12 meses después del parto. Es fundamental estar atentos a señales como:

  • Tristeza persistente o llanto frecuente.
  • Ansiedad intensa o ataques de pánico.
  • Irritabilidad o enojo sin causa aparente.
  • Cambios en el apetito o el sueño.
  • Dificultad para vincularse con el bebé.
  • Pensamientos intrusivos o miedo de hacerle daño al bebé.
  • Sentimientos de culpa, vergüenza o inutilidad.

Estos síntomas no deben minimizarse ni atribuirse únicamente al «cansancio normal» de la maternidad.

Romper el estigma y buscar ayuda

A pesar de la prevalencia de estos trastornos, muchas mujeres no buscan ayuda debido al estigma asociado a la salud mental y a la presión social de vivir la maternidad como una experiencia exclusivamente feliz. Sin embargo, pedir ayuda es un acto de valentía y cuidado. Existen tratamientos seguros y efectivos durante el embarazo y la lactancia que pueden mejorar significativamente la calidad de vida de la madre y su familia.

Construyendo redes de apoyo

El acompañamiento de la pareja, la familia, las amistades y los profesionales de la salud es clave para detectar y tratar a tiempo los trastornos de salud mental materna. Además, es fundamental promover políticas públicas que incluyan el cribado de depresión en las cartillas de embarazo y la formación de profesionales en salud mental perinatal.

Este 7 de mayo, unámonos para promover una maternidad más real, empática y acompañada. Hablemos de salud mental materna, escuchemos sin juzgar y tendamos la mano a quienes lo necesitan. Porque cuidar la salud mental de las madres es cuidar el bienestar de toda la sociedad.